Los Premios de Investigación de Google para América Latina se presentaron en el 2013 por primera vez con el objetivo de identificar, apoyar y reconocer a aquellos profesores y estudiantes que desarrollan investigación de vanguardia en áreas relacionadas con la misión de Google: informática, computación, ingeniería y ciencia. Así buscan incentivar la investigación con el fin de mejorar la calidad de vida de los latinoamericanos.
A principios de agosto, 24 duplas de investigadores, conformada por profesor de doctorado y estudiantes de maestría o doctorado, resultaron ganadores de los premios de en su versión 2016. En total se recibieron 473 propuestas provenientes de 13 países, que fueron evaluadas por un panel de 35 ingenieros de Google, quienes escogieron a los ganadores por el impacto, originalidad y calidad de las propuestas.
De los premios de este año, Google destaca el interés de los investigadores latinoamericanos en buscar soluciones que resuelvan problemas reales, principalmente relacionados con la salud, neurociencia y movilidad. Los reconocimientos fueron entregados en el Centro de Ingeniería de Google, en la ciudad de Bello Horizonte, Brasil. Y aunque la mayoría de los ganadores son brasileños, también hay provenientes de Argentina, México, Chile, Perú y Colombia.
Representando al país se encuentra una dupla de investigadores de la Universidad de los Andes: Pablo Arbeláez, profesor, y Andrés Felipe Romero, estudiante de doctorado en Ingeniería. Ellos ya habían sido reconocidos con este premio en el 2015, tras presentar un proyecto que busca mejorar la interacción humano-computadora por medio del análisis de la expresión facial automatizada, usando técnicas de aprendizaje profundo, color e información temporal. La segunda fase del proyecto, con la cual participaron en la versión 2016, les permitirá continuar trabajando en el tema, principalmente en el reconocimiento de la emoción de manera automatizada. Podrán desarrollar entonces un sistema que clasifique los gestos y expresiones para así entender los cambios de los mismos, y la manera de prevenir en el futuro ataques de epilepsia o temas relacionados con la somnolencia. Más adelante, el campo de acción de esta investigación podrá ampliarse a temas como la prevención de ataques violentos, infartos, estrés, entre otros.
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